Impacto de la alimentación en el sueño de tu hijo
Claudia Ramirez

Ya no doy más, si este niño no duerme no sé qué voy a hacer.

Si te sientes así vale la pena leer hasta el final.

Los niños hoy día se acuestan más tarde que en cualquier otra época de la historia, prácticamente se acuestan a la misma hora que los papás, teniendo requerimientos totalmente diferentes ya que su cerebro está en crecimiento.

La glándula pineal en el cerebro de tu hijo es del tamaño de una hormiga y está cerca del medio de su cráneo segregando un neurotransmisor y hormona llamado melatonina.

Imagínate que su producción adecuada depende mucho de cómo alimentas a tu hijo principalmente y también de otros aspectos como la hora en que se va a dormir. Las dos dependen de ti.

La melatonina necesita tener un ambiente bajo de metabolismo, es decir que el cuerpo no esté haciendo otras actividades metabólicas, como por ejemplo digerir; y especialmente un ambiente bajo en insulina, para que se libere adecuadamente, la melatonina es una hormona que relaja el sistema nervioso de tu hijo, fundamentalmente, además es desinflamatoria y es antioxidante.

Otra sustancia a tener en cuenta y de gran importancia es la hormona de reparación en el sueño que se llama hormona de crecimiento. Cuando hay generación de insulina inhibe su secreción -no quiere decir que no va a salir, pero es menor-; es específicamente reparadora del sistema nervioso y de las células.

Si tu hijo tiene menos hormona de crecimiento entonces tiene más insulina, produciendo más radicales libres -por producción de energía- y más estrés oxidativo, que es lo que sucede durante todo el día.

Si esto sucede, es decir más insulina menos hormona del sueño, pasa a ser un sueño con poca profundidad y con mucha menos posibilidad de reparar. De esta manera los conocidos ciclos circadianos no se cumplen a cabalidad y no se purifica el cuerpo para comenzar al siguiente día.

Si tu hijo come tarde cuando ya se va a acostar; se acuesta tarde para el no para ti y además una cena alta en carbohidratos, azúcares y proteínas de difícil digestión , estas haciendo la mezcla perfecta para que su sueño no sea reparador, porque estará las primeras horas en proceso digestivo, con un pico de insulina y muy poco tiempo para reparar, porque de eso se trata el sueño y no solo hablando de energía sino de todos los órganos del cuerpo.

¿Qué hacer entonces?

1) Primero generar un hábito de sueño a una hora adecuada a su edad, para que pueda dormir las horas suficientes para reparar y que su cerebro en desarrollo no se vea afectado.

2) Cenar temprano, al menos 2 horas antes de dormir y si te parece imposible al menos 1 hora.

3) Una alimentación que sea poco estimulante de la hormona insulina, para que tu niño logre llegar a la etapa de sueño profunda y reparadora que se conoce como REM.

Que comer específicamente, proteínas de fácil digestión como pescados y pollo, aunque la carne roja es excelente, es mejor que se coma en el día; a esta hora es muy recomendable el Caldo de Huesos porque su aminoácido Glutamina esencial para mantener sano y no poroso el intestino se convierte en GABA y permite que el cuerpo entre en descanso y reposo. Y vegetales cocinados preferiblemente como calabaza, brócoli, coliflor, ahuyama. Al estar cocinadas es mucho más fácil la digestión.

Existen algunos alimentos activadores que debes evitar al final del día como pimienta, ají, jengibre, té y cafeína porque estimulan la digestión y activan el sistema nervioso. Cocina sin ajo ni cebollas a esa hora porque son aliáceos y producen estímulos de liberación, especialmente de adrenalina.

Si tu hijo está teniendo problemas reales de sueño y la vida se te está convirtiendo en caos. Lo ayudas con una alimentación baja en carbohidratos durante todo el día, por el mismo efecto de la segregación de insulina.

Al ir mejorando su sueño con hábitos constantes y coherentes y mejorando en digestión, es probable que su melatonina vaya subiendo en concentración y su hormona de crecimiento también.

Todas sus células se reparan con esa hormona. Si esa hormona tiene mejor concentración,

Su salud va a mejorar, su intestino estará mejor y su desarrollo neurológico se optimizará.

Como ves están en tus manos estas medidas y por lo tanto la salud, bienestar, felicidad y desarrollo neurológico de tu hijo.

Si tienes dudas no dudes en escribir.